Buscar casa en internet no es sentarte cómodamente en tu sofá, tomar el teléfono en una mano y con tu pulgar ir deslizando la pantalla.

Esperamos que esta guía y el contenido de este artículo os sirva de ayuda.

Os recomendamos que tengáis paciencia y desde luego, dejaos aconsejar por expertos en todo momento.

Detrás de este texto hay una agente inmobiliaria sí, y también un persona, que si recibe una llamada de alguien o devuelve la llamada a ese número de teléfono que se ha quedado almacenado en su móvil porque no le ha dado tiempo a descolgar antes y, después de presentarse lo que se encuentra es una respuesta del orden de: “Ay, pues es que no sé ni de que piso me hablas. He visto tantos y voy llamando según me parece que…”. ¿Saben lo que dan pie a pensar? Pues que esa persona realmente no busca un inmueble porque necesita un lugar dónde vivir o dónde invertir su dinero, sino que es algo que hace porque le apetece pero sin un objetivo final concreto. No digo que no lo puedan hacer, claro, y atenderemos sus cuestiones, lo que sucede es que, no podremos ser tan eficientes si el cliente no tiene un mínimo de criterios fijados sobre los que al menos emprender la tarea.
Por tanto, les recomendamos que si realmente necesitan una vivienda, desean cambiar de casa, quieren invertir su dinero en un bien raíz y están totalmente convencidos de ello, tomen papel y lápiz, o se crean una tabla Excel, o cualquier tipo de método que se les ocurra para poder tener fijados los criterios de búsqueda y en base a ello poder ir comparando.
A continuación les damos un ejemplo de tabla para que vean lo que les queremos recomendar:

Lo primero que deben fijar es un presupuesto, para ello les recomendamos consulten con un asesor financiero (Habitale Avenida del Cid ofrece este servicio gratuitamente) o con su banco habitual.
La ubicación es algo que obviamente se tiene clarísimo y en cuanto a la dirección, con suerte tendrán el nombre de la calle aunque a veces, si conocen la zona en la que están centrando su búsqueda, por las imágenes y tirando de google maps, lo pueden averiguar.

Otra de las claves para elegir vivienda es la antigüedad del edificio. Este dato será de gran importancia a la hora de la tasación hipotecaria (junto con la ubicación, altura y si tiene ascensor o no), cuánto más antiguo sea el edificio más se depreciará el valor de la vivienda. Recomendamos no obstante también estar atentos al estado de conservación del edificio, si se ve en estado mantenido, si se han ido sustituyendo elementos o instalaciones, si se han hecho mejoras de accesibilidad. Esto además también nos arrojará algún dato sobre nuestros futuros vecinos.

En cuanto a la superficie, es importante se aseguren de que los m2 que aparecen en la publicación son útiles (superficie que se puede pisar dentro de la vivienda, incluidos armarios empotrados, excluyendo tabiques, pilares y demás elementos estructurales). Si tenemos la superficie construida, para hacer un cálculo aproximado de la superficie útil, podremos minorizar la construida un 15% y así obtendremos el espacio habitable de ese inmueble.

La orientación de la vivienda es definir la orientación de sus fachadas. Se trata de un factor muy importante aunque habitualmente la gente no lo tenga en su lista de requisitos. De ella dependerá en gran medida el consumo energético de nuestra vivienda.

En cuanto a la definición de una vivienda como interior o exterior, deben saber que quién da de alta las publicaciones de venta de los inmuebles, ante una vivienda que tiene salón, cocina y habitación doble recayentes a fachada principal (a calle) ya considerará que se trata de una vivienda exterior, aunque no todas sus estancias sean exteriores, es decir, con sus ventanas recayentes a la vía pública.
Como apunte os puedo decir que, si la altura de la vivienda y la orientación de la vivienda favorecen la iluminación y la ventilación, el hecho de que las habitaciones recaigan a un patio de luces o patio de manzanas, puede favorecer que sean estancias más silenciosas (pero bueno, como todo, cada cual tiene sus preferencias).

Una vez que os hayáis centrado en esas 5 o 6 viviendas que a priori mejor os han encajado, contactad con la agencia que las gestiona o bien con vuestro agente inmobiliario y averiguad todo aquello datos que os falten. Recomiendo también que preguntéis por los gastos fijos de la vivienda, es decir, gastos derivados de la comunidad de propietarios (si no se trata de una vivienda independiente) e IBI. Son gastos que debéis sumar mensualmente a la cuota de la hipoteca que os proporcione vuestro avalista.

Una vez que tengáis toda la información recopilada ya podéis concertar las visitas a aquellos pisos en los que estéis verdaderamente interesados.
Elegir vivienda no es tarea fácil. El proceso a nivel legal es delicado, si no sois técnicos en edificación quizás hay muchos factores constructivos que se os pueden pasar por alto, no obstante, sois vosotros los que elegís y es vuestro capital el que está en juego, por tanto, os debéis implicar totalmente en el proceso de selección.